iDental denuncias, la verdad detrás de “dentistas con corazón”

La última entrada dedicada a iDental, que presumen de hacer “asistencia social dental”, trata las dificultades que se encuentra el paciente dental antes de ponerse en manos de esta cadena de clínicas. iDental denuncias, ese es el eslogan con el que se les puede conocer a partir de ahora.

Más importante son los problemas que se encuentran después de haber firmado el presupuesto. Después de muchas entrevistas con nuestros clientes, hemos descubierto un patrón que siempre se repite en los tratamientos. Lo primero, es que siempre se demoran en empezar. Es cierto que los retrasos son constantes durante todo el tratamiento, pero esta paralización inicial quizá no se debe a la saturación y falta de organización.

La gran mayoría de los tratamientos en iDental no se pagan al contado ni en varias veces que se ingresen en la propia clínica, sino que se financian mediante un préstamo vinculado, a través de alguno de los bancos o financieras con los que trabajan estos dentistas: Cetelem, Francciona (absorbido por Evo Finance), Sabadell Fincom (luego Sabadell Consumer Finance), Pepper Finance, Santander o BBVA, entre los más importantes.

Así funciona la estrategia de iDental:

La Ley 16/2011, de 24 de junio, de contratos de crédito al consumo, establece que el consumidor (en este caso, el paciente), tiene derecho a desistir del contrato de préstamos vinculado en el plazo de 14 días desde la firma o celebración. Si el paciente de iDental se arrepintiera de haber firmado tan precipitadamente, empujado por las técnicas de venta agresivas, y decidiera cancelar el préstamo dentro de esos catorce días iniciales, no estaría obligado a pagar nada a la financiera, y sería la clínica quien debería devolver el dinero a la financiera o banco, en caso de que ya lo hubiese recibido, o no lo recibiría si es que todavía no le habían entregado el dinero. Es decir, el paciente se vería libre de cualquier obligación con la financiera.

Nos cuentan muchos clientes en el despacho que, al principio, acuden ilusionados por la posibilidad de tener un tratamiento odontológico a bajo precio. Con el gran presupuesto que invierte iDental en marketing e imagen pública, los pacientes creen que todo irá como la seda. Sin embargo, ya la primera cita puede ser un calvario de horas perdidas en la sala de espera para, como guinda, ser atendido por un dentista con tan poca experiencia que asusta. Al menos, esa es la sensación que nos transmiten nuestros clientes, que han querido cancelar nada más tener la primera visita.

Los responsables de la clínica nunca dan la primera cita dentro del plazo de 14 días en que los pacientes podrían haber cancelado el préstamo. Lo tienen tan estandarizado que, en los impresos de cancelación del tratamiento (de los que hablaremos más adelante), ya figura la afirmación de que se está cancelando después de ese periodo, ¡Ni contemplan la posibilidad de que alguien intenten cancelar antes! Y no lo contemplan porque, incluso si algún paciente bien informado lo intenta, le ponen todas las dificultades burocráticas que pueden.

Así, iDental sólo permite presentar la solicitud de cancelación previa petición de cita, que se suele alargar más de un mes. Una empresa diligente tramitaría todo en poco tiempo, pero es que ni siquiera hablamos de eso, sólo de que el paciente presente la solicitud. Algo totalmente automático, mecánico y que no permiten hacer sobre la marcha. ¡Qué casualidad que les venga tan bien este retraso para que expire el plazo de 14 días del desistimiento unilateral! No nos corresponde a nosotros decir si iDental estafa a sus clientes, para eso están los juzgados.

Pero aquí no terminan las amarguras del paciente que intenta cancelar el préstamo y el tratamiento. En el impreso predispuesto por iDental para que lo firme el cliente como “condición imprescindible” para poder tramitar la baja, se incluye la cláusula de que para calcular cuánto dinero deben devolver estos supuestos “dentistas con corazón”, se tendrán en cuenta los precios originales, los no rebajados. Es decir, que el paciente aceptó el tratamiento porque se ofrecía un precio muy bajo, rebajado, pero si quiere echarse para atrás, las intervenciones sí realizadas se le van a cobrar como si hubiera aceptado el precio sin rebajar. El que ellos llaman “precio medio de mercado”.

En Justicia Dental ayudamos a los afectados iDental

En Justicia Dental creemos firmemente que esta forma de actuar no es honesta y, además, la pretensión de que se paguen unos precios fantasma que nunca se han tenido en cuenta para contratar es nula y abusiva, además de que la redacción de la cláusula adolece de múltiples defectos y oscuridades. Por eso, hemos de aconsejar a nuestros clientes y a cualquier otro afectado que no se resigne y no permita que le descuenten cantidades indebidas en caso de pedir la cancelación. No permitamos que siga creciendo el número de afectados de iDental.

Para conocer más sobre los casos de estafas de este tipo de clínicas dentales os dejamos el enlace del artículo que habla sobre ello en El Confidencial (http://www.elconfidencial.com/empresas/2017-04-24/justicia-dental-vitaldent-funnydent-dentistas-dental-lawyers_1370762/), donde nuestro socio Guillermo Saénz participa en una entrevista a este periódico.